Título: Final Destination 5 (Destino Final 5)
Año: 2011
Género: Terror, Thriller
Director: Steven Quale
Guión: Eric Heisserer, Jeffrey Reddick (personajes)
Duración: 92min
Reparto: Nicholas D'Agosto, Emma Bell, Arlen Escarpeta, Miles Fisher
Produc.: New Line Cinema, Practical Pictures, Parallel Zide, Jellystone Films
Presup.: $40 millones aprox.
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Año: 2011
Género: Terror, Thriller
Director: Steven Quale
Guión: Eric Heisserer, Jeffrey Reddick (personajes)
Duración: 92min
Reparto: Nicholas D'Agosto, Emma Bell, Arlen Escarpeta, Miles Fisher
Produc.: New Line Cinema, Practical Pictures, Parallel Zide, Jellystone Films
Presup.: $40 millones aprox.
Tuve mis
dudas sobre si iría o no, a ver esta película al cine. Había visto el trailer y
así entendido que esta secuela sería algo distinta de las anteriores, para que
fuera más llamativa. En principio, eso resultó cierto, pero las nuevas
ideas, no lo suficientemente sólidas como para tapar los muchos baches de un
guión bastante malo.
Mi puntaje: 2/10
Sin
embargo, por ser un fan del morbo, al final accedí a darle una oportunidad. Ahora me doy cuenta de que fui demasiado
ingenuo.
Destino
Final 5 es una
vez más, la historia de un grupo de amigos, quienes, gracias a que uno de ellos
tiene una visión, consiguen salvarse de morir en un accidente en cadena (en
este caso, un puente que colapsa), solo para ser, luego, acechados por la
muerte.
Se trata
de una película nada inteligente, que vuelve a explotar, de nuevo, los mismos
exactos elementos de sus cuatro predecesoras, salvo que a medida que la serie
se alarga, cada nueva secuela va bajando aún más su nivel con respecto a las
otras.
En ella se
ve al tan distinguido Tony Todd, quien cosechara fama, entre otros proyectos,
por su participación en la clásica Candyman:
el Dominio de la Mente, y
quien siempre se ha caracterizado por su gran apego a este tipo de cine, aunque
sus películas parezcan, en muchos casos, bromas ridículas, no siendo esta la
excepción a la regla. El actor afro americano reinterpreta a William
Bludworth, un empleado de una morgue que aparece para retirar a los fiambres
cada vez que la muerte se ha llevado a alguien, y quien es el encargado de dar
a los chicos un mensaje a interpretar, del que estos deberán valerse
para salir con vida. Lo interesante aunque triste, es que se le pague para que
se pasee delante de las cámaras durante muy pocos minutos, enseñando la misma
cara de siempre, y con ese dejo llamativo y perturbador suyo, pero sin hacer
mucho más.
Si hay
algo en esta película que pueda destacarse, es que las muertes siguen estando
bastante bien logradas, en donde vuelan la tripas.
En cuanto
a lo negativo, se me ocurren varios aspectos, aunque no, porque fueran pasados
por alto, sino porque fueron detalles que no venían al caso. A
modo de ejemplo, cuando Sam (Nicholas D'Agsosto) tiene la visión que los
salvará al principio, el pavimento comienza a a agrietarse de la nada y el
puente entero se deshace en pocos segundos, algo que no me resultó nada
creíble, pero, ¡como si importara! O sino, que me corrijan los ingenieros
civiles.
Lo otro
lamentable fueron las actuaciones, ya que no hay ni una que sea aceptable. Pero
como buen espectador, fiel al género, traté de pasar eso por alto, para
centrarme sólo en los que iban muriendo.
Lo último
que voy a criticar es el uso del 3D, ya que no recuerdo un solo momento en el
que me dijera "que bien que está aplicado". La mayor parte del tiempo
hasta me olvidé de que la estaba viendo en ese formato, ya que además de no
aportarme nada, me encareció la entrada al cine.
Mi puntaje: 2/10
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