sábado, 5 de noviembre de 2011

"Cómo ver dos películas en una"

Título: Territories (Territorios)
Año: 2010
Género: Historia, Terror
Director: Olivier Abbou
Guión: Olivier Abbou, Thibault Lang Willar
Duración: 91min
Reparto: Roc LaFortune, Sean Devine, Nicole Leroux, Cristina Rosato, Michael Mando, Alex Weiner, Tim Rozon, Stephen Shellen.
Produc.: Capture The Flag Films, Les Films Esplanade, Les Films du Territoire, Noodles Production
Presup.: $CAD 3 millones aprox.

Territorios trata acerca de un grupo de amigo, quienes, luego de haber asistido a un casamiento en Canadá, están regresando a Estados Unidos, cruzando la frontera, cuando son detenidos por un peculiar policía. Este individuo, junto a su compañero de ronda, en principio sólo desean ver sus pasaportes. Salvo que las cosas acaban tomando otro rumbo.
Con el desarrollo de esta película Olivier Abbou logra hacer dos cosas, muy contradictorias, una de la otra. Por un lado nos muestra su tarjeta de presentación, dirigiendo, muy prolijamente, toda la primera parte, en donde nos encontramos ante un filme correctamente actuado, guionado y con muchísima tensión, algo que da gusto ver. 
Luego, para el tramo final, lamentablemente contradice todo ese notable desempeño, mostrándonos, en cambio, cómo destrozar una película hasta que se desangre. Entoces, esto nos conduce hacia una gran interrogante: ¿Cómo es posible hacer una película, en donde una parte sea funcional y atrapante, y la otra, una pérdida total de cualquier lógica? He aquí la respuesta.
Con Jalil (Michael Mando) al volante, nuestro grupo de fiesteros circula por la ruta a altas horas de la madrugada y a punto de cruzar la frontera, cuando los faros de un vehículo de patrulla les revela la presencia de un individuo uniformado, con una linterna. Seguidamente, Jalil detiene su auto, como corresponde, para pasar por el chequeo rutinario. Es así como un sujeto calvo, de baja estatura y barba negra recortada, se acerca a su ventanilla y le pide el pasaporte. Jalil le explica que él no lo lleva consigo y que lo tiene en la valija, y esto, ya al policía no le gusta. Algo contrariado, este permite a Jalil descender del auto, pero, curioso detalle, no sin antes insistirle en que lo haga con cuidado y con las manos en alto. Jalil cumple con el pedido, sin embargo, su pasaporte no ha sido más que una excusa para que, poco después, él sus amigos sean acusados, indebidamente, de no respetar a la autoridad, posesión de narcóticos, y por si esto fuera poco, de presentar una amenaza para la seguridad del país, según el juicio del policía. Todas estas incriminantes funcionarán como detonantes para que este trastornado servidor de la ley disfrute practicando con ellos todo tipo de atrocidades.
La tensión en Territorios ha aumentado en cuestión de instantes y se mantendrá bastante bien durante cerca de cuarenta y tantos minutos, momento en que los muchachos habrán pasado por enjaulamiento e interrogatorio. No obstante, el señor Olivier Abbou tuvo la nada justificada idea de cambiar, completamente, de punto de vista, del sufrimiento de las víctimas, al tranquilo detective (Stephen Shellen) encargado del asunto. Con él, la película se torna lenta, aburrida y se aleja, innentendiblemente, de los personajes que realmente importan, como si el director hubiera optado por cambiar de argumento, pero dentro del mismo metraje, y además homenajeando, en cierta manera, al clásico de Hitchcock, Psicosis, por incluir la muerte del detective, cuando se hunde con su auto en el río. Abbou también, inserta un par de planos en los que vemos al detective soñando con una niñita mientras descansa en un motel, algo que tampoco aporta, absolutamente nada a la película, que ha caído casi que en un vacío narrativo.

Mi puntaje: 3/10


To access the english version click here